Nuestro pelo está vivo.Voy a mimarlo.

Siempre he sido de las que no le han prestado demasiado tiempo a mi cuerpo. Pero creo que me ha llegado el momento de hacerlo. Y voy a intentarlo de forma terapéutica y tradicional si puedo. Por eso estas recetas que iré colgando en el blog , tendrán el fin de hacer que mi cuerpo se sienta mimado. Tengo el pelo teñido y con moldeado; y soy tremendamente vaga para ir a la peluquería o al instituto de belleza, dejando a un lado que sea asequible o no económicamente. No me gusta, pierdo un tiempo, que antes no tenía y pocas veces he salido contenta con los resultados. Las razones son variadas; ahora básicamente, es que como no estoy acostumbrada salvo para hacer cortes o moldeados ,a ir ; sencillamente… Es difícil que me guste, porque no atinan a interpretar lo que quiero y, voy a lo esencial. Llegó a casa y dehago el peinado y me peinó yo.

A las que somos estilo Juan palomo,yo me lo guiso yo me lo como es difícil que nos guste lo que mágicamente imaginamos y que pocas veces conseguimos. Así que aprendemos a trabajarnos el pelo ,o a no trabajarlo ,como es mi caso ,en este momento. El moldeado , que ya he conseguido que me lo hagan más o menos como quiero, ha sido mi descubrimiento de estos cuatro últimos años. Por esta razón ahora pretendo cuidar mucho este cabello que resulta castigadillo para darle esa forma que me permite en apenas tiempo y con mis dedos darle volumen y forma. Y así ahorrar esfuerzo ,dinero y tiempo; ingredientes que traslado a cosas que me satisfacen. Aquí debajo dejo el enlace de la mascarilla de hoy. Ésta nueva forma del blog no la dominó pero las cosas cambian y tengo que adaptarme a ellas.